Una insólita ordenanza está a punto de tratarse en el Honorable Concejo Deliberante de Pinamar, ya que propone pasar del ámbito público a un empresa privada una superficie de 2.203,50 metros cuadrados frente al mar, pero se trata nada más y nada menos que de una calle.
El lugar en cuestión tiene un valor estimado, según la ordenanza, en u$s1.200.000, a razón de unos 545 dólares (tipo de cambio oficial) el metro cuadrado. Una verdadera oferta, dada la ubicación privilegiada de la calle, en uno de los balnearios más costosos de la Argentina.
El predio de 84,75 metros de largo y 26 metros de ancho, está lindero a KU, un clásico de la noche pinamarense que cerró en 2016 y donde pretende elevarse un proyecto de hotel all inclusive.
Los fondos que se obtengan de la operación inmobiliaria serán destinados a compras de “bienes de interés y necesidad” para el municipio.
Según la oposición, el valor real del espacio que se pretende privatizar es de u$s4,5 millones. Es decir, 3,3 millones por arriba de lo que pretende alzar el intendente de Pinamar, Martín Yeza.