El equipo técnico del Fondo Monetario Internacional y el Gobierno aprobaron este viernes la tercera revisión del programa con Argentina y se espera que el directorio le de la luz verde en las próximas semanas, lo que destrabará un giro de unos US$6.000 millones antes de fin de año.
El organismo señaló que hubo “avances”, pero que la situación macroeconómica “aún es frágil”.
El Fondo hizo el anuncio en un comunicado, luego de que terminaran las evaluaciones de los números con la delegación argentina que estuvo esta semana en Washington.
Señalaron que las metas fiscales y monetarias al 30 de septiembre se cumplieron y que los objetivos están encaminados hacia fin de año.
Durante toda la semana la delegación argentina (el viceministro Gabriel Rubinstein; el jefe de asesores Leonardo Madcur; el secretario de Hacienda Raúl Rigo; el de Finanzas, Eduardo Setti, y Marco Lavagna, asesor en relaciones financieras internacionales) estuvieron afilando los números con el equipo de técnicos del Fondo encabezado por Luis Cubeddu.
Hoy cerraron el llamado staff agreement, el acuerdo técnico que debe ser ahora revisado en varias instancias del Fondo, un proceso que suele demorar unas dos semanas, y luego será presentado al directorio para su aprobación final.
Se estima que pasará esa instancia sin problemas antes de fin de año y así el Gobierno cerrará diciembre con unos US$ 6.000millones más en sus arcas. La cifra varía según la cotización de los DEG (la moneda del Fondo) al momento.
“La gestión macroeconómica prudente y los esfuerzos para movilizar el financiamiento externo están respaldando la estabilidad macroeconómica: se está restableciendo el orden fiscal, se está moderando la inflación, esta mejorando la balanza comercial y se está fortaleciendo la cobertura de reservas”, dijo el Fondo en su comunicado.
Sin embargo, adivirtió que “la implementación continua y decisiva de políticas sigue siendo esencial para reducir aún más los desequilibrios macroeconómicos, especialmente en el marco de un contexto externo e interno más desafiante”.
“Se han logrado avances, no obstante, las condiciones macroeconómicas son aun frágiles y una sólida implementación del programa es esencial a futuro. En particular, será fundamental continuar con el proceso de consolidación fiscal que prevé una reducción del déficit fiscal primario del 2,5 % del PIB en 2022 al 1,9 % del PIB en 2023. Esto debe estar respaldado por esfuerzos para seguir movilizando ingresos, fortalecer controles de gastos, y mejorar de manera oportuna la focalización de los subsidios y la asistencia social, al tiempo que proporciona espacio para el gasto social y de infraestructura prioritario”, advirtieron.
Señalaron que los objetivos del programa permanecen sin cambios durante el resto de 2022 y 2023.
El Fondo destacó la importancia del acuerdo con el Club de París y también que se siga monitoreando el financiamiento internacional para los distintos proyectos de infraestructura. También se habló de la correcta asignación de los subsidios.
También el FMI y los técnicos argentinos analizaron el avance en la implementación de la estrategia antilavado y el impacto de la firma del acuerdo de intercambio automático de información impositiva (FACTA) con Estados Unidos, que según dijo el Tesoro a está a Clarín está “avanzado” y espera rubricarlo “pronto”.
Las metas se cumplieron, aseguran en el FMI. Las fiscales deberían cerrar este año con un 2,5% de déficit (1,9% el próximo año) y las emisión monetaria al 1%.
Respecto de las reservas el programa establece que deberían haber un acumulado de US$5.000 millones a fin de año. En realidad, antes se había fijado en 5.800 (y sumar 4.000 millones más el año próximo), pero en la segunda revisión se “corrieron” unos 800 millones para el año que viene, que debería cerrar con 9.800 millones en las arcas.
La llegada de los nuevos dólares soja, las exportaciones y los fondos frescos del BID de libre disponibilidad ayudaron a alcanzar esa meta.
Desde Economía, dijeron que el cumplimento de la smeetas se dio “a pesar de los impactos finales negativos” de la guerra de Ucrania.