Jair Bolsonaro agradeció a sus votantes, pero no reconoció su derrota en una declaración dada en el Palacio del Planalto, sede del gobierno, a casi 48 horas de la victoria de Luiz Lula da Silva y en medio de una creciente tensión por los cortes de rutas que realizan camioneros que desconocen el resultado del balotaje.
Además, dijo que seguirá siendo fiel a la Constitución.
Fue el primer pronunciamiento público del presidente saliente de Brasil tras su apretada derrota en el balotaje de este domingo ante Lula da Silva.
En la biografía de su cuenta de Twitter Bolsonaro se sigue presentando como presidente y “candidato a la reelección”.
“Quiero empezar agradeciendo a los 50 millones que me votaron el último 30 de octubre. Los actuales movimientos populares son fruto de la indignación y el resentimiento de cómo ocurrió el proceso electoral. Las manifestaciones pacíficas no pueden perjudicar a la población con la destrucción de patrimonio, impidiendo el libre tránsito”, afirmó sobre los cortes de ruta.
Brasil vive por estas horas una jornada de bloqueos en las rutas fogoneados por los simpatizantes de Bolsonaro, que aún no reconocen el triunfo de Lula el pasado domingo.
Inmediatamente, los líderes de las movilizaciones reafirmaron que seguirán con los bloques por 72 horas e hicieron un llamado a que más gente se sume y pidieron que el Ejército “los acompañe”
El Supremo Tribunal Federal de Brasil ordenó a la policía federal de caminos que despeje de inmediato cientos de carreteras en todo el país bloqueadas por camioneros que apoyan al presidente.
La mayoría de los jueces del tribunal respaldó la decisión, que acusa a la policía de caminos de “omisión e inercia”.
En la previa a la segunda vuelta Bolsonaro había cuestionado repetidamente la confiabilidad del sistema electoral del país, alegando que las máquinas de votación electrónica son propensas al fraude.
Pero nunca aportó ninguna prueba, ni siquiera cuando se lo ordenó el tribunal electoral.